miércoles, 23 de junio de 2010

CONSECUENCIAS EN NUESTRO CUERPO

Cómo Pueden Afectarnos Ciertos Contaminantes Específicos

Ozono a nivel del suelo

El ozono es un irritante fuerte que puede limitar las vías respiratorias, forzando al sistema respiratorio a trabajar más para proporcionar oxígeno. También puede:

* Agravar enfermedades respiratorias como enfisema, bronquitis y asma
* Dañar partes profundas de los pulmones, aun después de que desaparecen ciertos síntomas como tos o dolor de garganta
* Causar ruido al respirar, dolor de pecho, sequedad en la garganta, dolor de cabeza o nausea
* Disminuir la resistencia a las infecciones y producir mayor fatiga

Materia particulada

Una serie de estudios científicos han establecido una relación entre la materia particulada, especialmente las partículas finas, y una variedad de problemas de salud importantes:

* Empeoramiento del asma, enfermedades cardíacas y pulmonares
* Admisiones al hospital y visitas a la sala de emergencias por problemas respiratorios
* Síntomas respiratorios agudos, incluyendo dolor de pecho intenso, jadeo y empeoramiento de la tos
* Menor función pulmonar que puede experimentarse como falta de aire
* Bronquitis crónica
* Muerte prematura

Monóxido de carbono

El monóxido de carbono reemplaza al oxígeno en los glóbulos rojos de la sangre. Las personas que tienen enfermedades cardíacas están más propensas a desarrollar dolores de pecho cuando se exponen a niveles bajos de monóxido de carbono. La exposición a niveles altos de monóxido de carbono puede:

* Disminuir los reflejos y causar confusión y somnolencia
* Resultar en la muerte en los espacios cerrados (por ejemplo, garaje cerrado) a concentraciones muy altas

Enfermedades de los habitantes BAGAZOSIS

Aumentaron mucho las enfermedades respiratorias y también las de la piel, y hay mucha gente con distintos tipos de cáncer. Hay mucha gente con asma, todos los problemas respiratorios se agudizan pero ni los médicos ni nadie quiere hablar; los efectos ambientales no se pueden demostrar porque el Ministerio de Ecología jamás hizo un estudio, y, si lo hizo, nunca conocimos los resultados.
Causan en sus
habitantes la enfermedad llamada bagazosis.

El bagazo es el residuo de la caña de azúcar, este material es utilizado para la fabricación de papel por su alto contenido de celulosa. La bagazosis es una enfermedad que se presenta en trabajadores expuestos a la inhalación de polvos de bagazo de caña enmohecido. Forma parte de un conjunto de enfermedades de características clínicas, inmunológicas e histopatológicas semejantes. El término correcto es el de neumonitis por hipersensibilidad, ya que la respuesta inmunopatológica se localiza en la porción distal del árbol respiratorio y abarca desde el bronquiolo terminal respiratorio, hasta los alvéolos y los capilares pulmonares.

El bagazo fresco y húmedo apilado a la intemperie produce un residuo de jugo que es susceptible de ser fermentado por levaduras, la temperatura favorece el crecimiento de muchas especies de hongos principalmente actinomiceto termo y mesofílicos. Cuando el bagazo esta viejo y seco se enmohece y puede contener cantidades enormes de esporas (240 a 500 millones por gramo de peso) de las que una parte se libera hacia el ambiente, sobre todo cuando se manejan y transportan las pacas, o cuando se rompen, se trituran o se muelen.

NO A LAS PAPELERAS!! SI A LA VIDA DIGNA DE TODOS LOS HABITANTES

Si destruímos nuestro suelo, sobre qué nos pararemos? Si destruímos la fuente de nuestro oxigeno, qué respiraremos??? Si destruímos EL PLANETA, qué comeremos, qué beberemos???? Si destruímos LA NATURALEZA, existiremos????????
Es lamentable lo que pasa en el mundo, pero muchos sabemos de los daños ecológicos que podemos revertir y no hacemos nada, el tratamiento de los residuos en el hogar, la utilización misma del papel en la casa, la utilización de la energia del agua, las pilas extremadamente contaminantes, etc.
Lo que se hace con el rio no tiene nombre, se le saca casi todo el caudal de agua y se lo despilfarra, previamente contaminandolo desde que nace hasta donde desemboca, en casi un 90% el agua ya casi no tiene oxigeno por lo tanto ya casi no hay pescados, a pesar de las leyes que lo prohiben se sigue desmontando los campos, desplazando gente, PERSONAS, que viven alli en la idigencia.
Nos parece muy interesante que sigan luchando desde todos los lugares de nuestro país, para que no se instalen las papeleras, ya que perjudicaría a mucha gente con su salud como así también el ecosistema natural.

Manos de obra en las pasteras

Estas empresas utilizan generalmente el eucaliptus para la obtención de celulosa, esta especie presenta un rápido crecimiento en climas templados. Cabe aquí la pregunta ¿Por qué la inclinación hacia climas templados? ¿Por qué no cálidos? He aquí la respuesta:
Porque todo el mundo se ha visto sensibilizado por la destrucción de los bosques tropicales como el Amazonas o de los manglares sin prestar demasiada atención a nuestros bosques templados.
Un importante por considerar es la mano de obra empleada para este tipo de actividades. En general se utilizan personas adultas, varones vigorosos que sirvan para desmontar, trabajo que se realiza cada vez que la empresa gana terreno. Cada seis años para los “eucaliptos” terminados y mano de obra fina, mujeres y niños, para el cuidado y la plantación de plantines. Los niños son especialistas en detectar los hormigueros y manipular los insecticidas, hecho que los convierte en una población de alto riesgo de muerte. Entre los seis y ocho años se retoma la actividad, para la tala y renovación de los árboles, que consumen una gran cantidad de agua, secando arroyos, lagunas y ojos de agua con el consecuente daño al micro y macro flora.

Daños causados por las pasteras

Estas industrias tienen la característica de producir un alto grado de contaminación ya que emiten como producto de desecho dioxinas y anhídrido sulfuroso.
Las emanaciones tóxicas y con olor desagradable - similar al del huevo podrido -afectarán a un radio estimado de 60 kilómetros.
También presenta la problemática de la extensión del monocultivo de eucaliptos que constituye la materia prima para este tipo de actividad. En este sentido, es importante el daño que la tala indiscriminada de especies arbóreas autóctonas de la región ha ocasionado a la biodiversidad .El monocultivo viene afectando a nuestra región y se prevé un estrago mayor con influencias sobre la salud humana y una profundización del desequilibrio del ecosistema.
el progreso tecnológico aporta al progreso social. Cada una de las fábricas empleará en forma directa a 300 trabajadores y generará otros puestos en forma indirecta que sumado al hecho de la inversión de 1000 millones de dólares por cada industria justificaría un “ leve” impacto ambiental. El crecimiento económico, a expensas de una naturaleza que se hace aparecer como inagotable no tiene límites.
Las plantaciones de eucaliptus prestan un óptimo servicio ambiental” porque utilizan el dióxido de carbono disuelto en el aire para fabricar su propio alimento paliando el efecto invernadero, 600.000 hectáreas de eucaliptus son la muestra viva de este poder humano.
Las plantas de celulosa emiten olores fuertes a causa de los compuestos de azufre. Otra de las sustancias que se eliminan en el proceso de producción son las dioxinas y furanos que probablemente se encuentren entre las más contaminantes y persistentes en la naturaleza ya que afectan toda la cadena trófica y como máximo consumidor, al hombre. Las dioxinas son bioacumulativas y se les atribuyen propiedades cancerígenas.
Los estudios epidemiológicos han evidenciado los posibles efectos sobre la salud humana, como consecuencia de la exposición a estos compuestos. Con certeza, pero sin demostración científica exacta, el efecto se extendería hacia la biodiversidad, de aves, de mamíferos, peces y otras especies de la zona.
La población más afectada es, sin duda, la de menores recursos, ya que este grupo poblacional utiliza la pesca como medio de vida y a fin de satisfacer sus necesidades alimentarias.

martes, 22 de junio de 2010

Papeleras misioneras


1) Alto Paraná (Misiones). Cuestionada por ambientalistas y vecinos por contaminación de agua, aire y destrucción de bosques nativos. La empresa afirma cumplir el estándar internacional. Tecnología: ECF. 2)Celulosa Puerto Piray (Misiones). Cuestionada por vecinos por falta de tratamiento de efluentes. Tecnología: utiliza cloro elemental. 3)Papel Misionero (Misiones). Cuestionada por ambientalistas por falta de tratamiento de efluentes. Tecnología: TCF.

Testimonios de vecinos

Obtuvimos testimonios de vecinos del triángulo formado por las localidades de Puerto Esperanza, Puerto Libertad y Wanda, donde viven unas 40.000 personas, en las proximidades de la planta Alto Paraná. Todos ellos pidieron reserva de sus nombres. Por eso llamaremos Vecino A, a quien dijo “al principio yo denunciaba mucho pero tuve que dejar de hacerlo cuando empecé a recibir amenazas y la familia me puso un freno”. Este vecino advirtió que “Alto Paraná desmonta hasta la orilla de los cursos de agua y así las aguas se contaminan con agrotóxicos y algunos arroyos, sin la protección del bosque, se secan”. El vecino que llamaremos B afirmó que “cuando se corrió la bola de que compraban tierras, hubo una estampida de colonos queriendo venderles la chacra: por la yerba, que fue hace unos años el oro verde, ahora no pagan más que 18 centavos el kilo; y lo mismo pasa con el té, con los citrus”. Vecino C contó que “en los cítricos se forman pintitas negras, las mandarinas se secan. Tengo tres árboles de mandarina y ninguno está dando fruta; los vecinos más viejos dicen que, antes de la fábrica, no era así”. Este vecino vive al sur de la planta, adonde “cuando hay viento norte, el olor se siente muchísimo más fuerte. Es nauseabundo”. Y “en los lugares del Paraná donde arrojan el desecho, el río cambia de color, toma un color amarillento, hay peces muertos, qué sé yo qué echan ahí”.

Y, en cuanto a las personas, “aumentaron mucho las enfermedades respiratorias y también las de la piel, y hay mucha gente con distintos tipos de cáncer”, según el Vecino A. “Hay mucha gente con asma, todos los problemas respiratorios se agudizan”, afirmó el Vecino C. Pero “ni los médicos ni nadie quiere hablar –sostuvo el Vecino C–; los efectos ambientales no se pueden demostrar porque el Ministerio de Ecología jamás hizo un estudio, y, si lo hizo, nunca conocimos los resultados”.

La empresa Alto Paraná, por su parte, sostiene que “desde junio de 2002, las operaciones forestales de esta empresa cuentan con la certificación ambiental ISO 14.001, lo que garantiza a nivel internacional que se realizan de acuerdo con la legislación vigente y compromete a la empresa a mantener un programa de mejoramiento ambiental continuo. ISO 14000 es el nombre del conjunto de normas ambientales de la International Organization for Standarization”. Según la firma, “muestra de nuestro compromiso hacia el cuidado del ambiente es la conservación de una reserva forestal de más de 16.000 hectáreas de selva paranaense y 11.000 hectáreas de bosques naturales”.

En contrapartida, según el Vecino C, “las empresas tienen piedra libre: en Celulosa Puerto Piray, hace seis años, el Ministerio de Ecología llegó a labrar un acta por falta de tratamiento de efluentes, pero la empresa amenazó con cerrar la planta y, como todo el pueblo depende directa o indirectamente de ella, la gente misma pidió levantar la medida”.

Piedra libre

Hay otras papeleras, que es como decir: hay otra historia. Las otras papeleras son las que, silenciosamente hasta ahora, vienen produciendo y en muchos casos, según denuncias, contaminando en la Argentina. Las más conflictivas son Alto Paraná y Celulosa Puerto Piray, en Misiones.
Las denuncias sobre Misiones ejemplifican la “piedra libre” que las empresas estarían en condiciones de lograr, no sólo por la inacción de las autoridades reguladoras sino por la extorsión de hecho a la que pueden ser sometidas las poblaciones cuando sus fuentes tradicionales de subsistencia –por caso, el cultivo de yerba mate– les han sido sustraídas.

Ricardo Carrere forma parte de la ONG Guayubira, efectuó una investigación en la provincia de Misiones, donde observó que “en Papel Misionero hay una contaminación tremenda del río; apenas han puesto una redecita para que no se note la espuma”. Pero la planta que más interesaba a Carrere era Alto Paraná, que utiliza una tecnología de blanqueo (parcialmente libre de cloro). Este ambientalista empezó por advertir el “lamentable estado del río, donde los peces han desaparecido, las aves brillan por su ausencia y el aire huele a huevo podrido”. Además, se detuvo en un problema que no depende de la tecnología de blanqueo: el reemplazo de la biodiversidad propia de la selva misionera por uniformes plantaciones de pinos: “El sector forestal insiste en llamar ‘bosques’ a los monocultivos de árboles: intentan convencer de que están llevando una ‘reforestación’ pero estas plantaciones no tienen nada en común con un bosque y menos aún con la enormemente diversa selva misionera”, comentó Carrere. Un ejemplo serían los efectos causados por “el polen de los pinos: tratándose de grandes masas de árboles de una o dos especies, todos florecen en la misma época y desprenden enormes cantidades de polen, generando problemas respiratorios y alérgicos”. Otro efecto ecológico impensado es “la invasión de mosquitos”: porque “el alto consumo de agua por las plantaciones de pinos hace desaparecer a las ranas, que controlaban la población de mosquitos”, explicó Carrere.

miércoles, 16 de junio de 2010

Daños causados por fábricas de celulosa

*Contaminación de las aguas, el aire, la flora y la fauna.

Suelen quemar sus residuos para producir energía. Mucho de estos residuos tienen alto contenido de azufre que provocan un característico olor a huevos podridos. También es posible que formen ácido sulfúrico o dióxido de azufre en la atmósfera, con el consiguiente riesgo de lluvia ácida. También utilizan blanqueadores de cloro, de alto nivel contaminante, que en contacto con el agua forman dioxinas (sustancias tóxicas persistentes que deterioran el sistema inmunológico y son cancerígenas). Por otro lado, estas fábricas tienen la práctica de arrojar la materia orgánica sobrante al agua, donde se pudre, agotando el oxígeno de los cursos hídricos.

*Las emisiones de azufre, dioxinas y furanos producen cáncer y enfermedades respiratorias severas, cefaleas, dolores abdominales, conjuntivitis, faringitis, obstrucción bronquial, náuseas, vómitos, crisis de pánico, trastornos de sueño, anorexia.

Papeleras en Misiones


Las papeleras que funcionan en Misiones son:
Alto Paraná (Puerto Segundo, Misiones). Cuestionada por ambientalistas y vecinos por contaminación de agua, aire y destrucción de bosques nativos. La empresa afirma cumplir el estándar internacional. Tecnología: ECF (libre de cloro elemental).
Celulosa Puerto Piray (Piray, Misiones). Cuestionada por vecinos por falta de tratamiento de efluentes. Tecnología: utiliza cloro elemental.
Papel Misionero (Capioví, Misiones). Cuestionada por ambientalistas por falta de tratamiento de efluentes. Tecnología: TCF (libre de cloro).


Las papeleras contaminan los efluentes que van al Paraná con la producción de papel. Otro de los efectos de las fabricación de papel es el desmonte masivo, la muerte definitiva de una cantidad de especies autóctonas, y la transformación del paisaje y la biodiversidad se ve modificada plantando pinos. El monte hoy se encuentra en su mayoría en manos de empresas privadas. Entre el ocho y el diez por ciento de la provincia es propiedad de Arauco.